domingo, 3 de octubre de 2010

OCHENTA Y TRÉS


Nos vamos superando a la hora de tardar en publicar, pero bueno, la paciencia tiene su ciencia.Muchos de vosotros no comprenderéis el significado de esta historieta puesto que está basada en hecho reales, tan reales como lisérgicos.
En otros tiempos en los que íbamos a Moncloa de marcha en el bus número 83, en los que te podías drogar por 100 pesetas y divertirte con la imaginación ó en los que había que luchar por evitar cruzarse en el camino de un yonqui, surgían situaciones tan bizarras como la que os trato de contar.
Por cierto, esto se convertirá en un regalo para un gran amigo así que ya me podéis guardar todos el secreto (menos mal que este blog no lo sigue nadie).